En todo el país, los mexicoamericanos más jóvenes comenzaron a discutir una serie de problemas que afectaban a la población latina. Estos incluían la discriminación, la violencia policial, la pobreza y la marginación en la sociedad de la cultura latina. En Wichita, se unieron a este movimiento estudiantes de la Universidad Estatal de Wichita, quienes formaron la Asociación de Estudiantes Mexicanos Estadounidenses o “MASA”. Más tarde, este grupo se convirtió en parte de un movimiento nacional llamado “MEChA”, Movimiento Estudiantil Chicano de Aztlán. El movimiento chicano a menudo llama al sudoeste norteamericano “Aztlán”, ya que considera que los latinos tienen raíces en esta región.